Esta semana nos quedamos perplejos con la noticia del ciberataque a la agencia de ciberseguridad de Japón. Aunque no hay información específica del ataque confirmada por fuentes oficiales, se sospecha que hackers chinos vulneraron información sensible de las redes de la agencia. Lo que más nos asombra es que esto se descubrió nueve meses después de haber sucedido.
Japón tiene una historia como país innovador. Algunas de las grandes firmas de tecnología que se han destacado y que seguro conoces, son; Nintendo, Sony, Honda y Casio, entre otras. Durante muchos años fue un referente tecnológico y dejó de serlo durante un par de décadas cuando se adelantaron a la carrera países como Corea y Taiwán.
Y desde hace un par de años, Japón vuelve a invertir en I+D (investigación y desarrollo). De acuerdo con Christoph Siepmann de Generali Investments, “en el sexto Plan Básico de Ciencia, Tecnología e Innovación, Japón se fijó el objetivo de alcanzar los 120 billones de yenes [unos 770.000 millones de euros] en inversión en I+D entre los sectores público y privado durante cinco años a partir del ejercicio fiscal 2021. Su objetivo es hacer realidad la sociedad 5.0″.
Y a todo esto, ¿qué implica este ciberataque para nosotros?
Para empezar, tenemos que abrir los ojos. Si esto le pasó a la agenda de ciberseguridad de un gobierno que prioriza en su presupuesto a la tecnología, es seguro que esto le pueda pasar a cualquiera. Y con “cualquiera”, nos referimos a personas, empresas, órganos de gobierno e incluso infraestructura crítica de países.
Tenemos que hacernos a la idea de que mientras nuestra vida siga migrando a internet y al ciberespacio, también tendremos que ir adaptando nuestra educación, y nuestras prioridades de seguridad. Proteger ese valor intangible que en muchos casos se empareja con el económico, debe ser nuestra prioridad.
Lo anterior contempla desde la imagen de nuestros hijos en redes sociales y nuestras apps de cuentas de banco, hasta los archivos de información de dependencias de gobierno, y los miles de datos que generamos y almacenamos cada segundo.
¿Si ya sabemos que somos vulnerables, todo está perdido?
En CyberLat creemos que uno de los componentes más importantes para la ciberseguridad es la capacitación. Infórmate sobre cómo proteger tus cuentas, sobre las políticas de privacidad de las apps que utilizas, sobre las vulnerabilidades de tus equipos, etc. No hay excusas, tenemos más información que nunca al alcance de nuestras manos.
Si tienes una organización, comienza por hacerte las siguientes preguntas; ¿cómo tienes salvaguardada tu información?, ¿sabes qué vulnerabilidades existen en toda la cadena de valor?, ¿tienes un plan de acción en caso de un ciberataque?.
Sabemos que hacer un diagnóstico de una organización puede no ser sencillo. Cuenta con CyberLat para ayudarte, es hora de poner manos a la obra y que una vulnerabilidad no se convierta en una amenaza y en pérdidas económicas. Escríbenos a contact@cyber.lat para agendar una llamada con un asesor.