Observamos que con frecuencia se producen diversos ataques informáticos dirigidos a organizaciones en una amplia gama de sectores, incluyendo el financiero, hotelero, bancario, educativo y de salud, entre otros.
Mantener a nuestra empresa sin una política de ciberseguridad y sin asignar un presupuesto a este fin es una situación que ya no podemos permitirnos, dado que la falta de acción conlleva un alto riesgo de sufrir pérdidas económicas significativas. Es importante recordar que la principal motivación detrás de estos ciberataques suele ser de índole monetaria, y cualquier beneficio obtenido por los ciberdelincuentes se considera un éxito para ellos.
Sabemos que no todas las empresas pueden costear contar con una estrategia de ciberseguridad robusta, te compartimos diez acciones que puedes empezar a tomar desde hoy para proteger a tu empresa. En CyberLat te podemos ayudar a definir, adecuar y a administrar lo que sea mejor para tu organización, y a capacitar a tus empleados.
Concientización y formación: Educar a los empleados sobre las amenazas cibernéticas, las prácticas seguras en línea y cómo reconocer correos electrónicos y enlaces maliciosos es fundamental.
Mantener el software actualizado: Asegurarse de que todos los sistemas operativos, software y aplicaciones estén actualizados con los últimos parches de seguridad.
Firewalls y antivirus: Implementar firewalls y software antivirus confiables en todas las computadoras y servidores para detectar y bloquear amenazas.
Política de contraseñas robusta: Exigir contraseñas seguras y cambiarlas regularmente. Utilizar autenticación de dos factores cuando sea posible.
Copias de seguridad regulares: Realizar copias de seguridad frecuentes de los datos críticos y almacenarlas fuera del sitio para evitar la pérdida de información en caso de un ataque.
Control de acceso: Limitar el acceso a sistemas y datos solo a empleados que lo necesiten y revocar dicho acceso cuando ya no sea necesario.
Auditoría de seguridad: Realizar auditorías de seguridad periódicas para identificar vulnerabilidades y debilidades en la infraestructura de TI.
Gestión de parches y actualizaciones: Tener un proceso sólido para gestionar las actualizaciones y parches de seguridad de forma oportuna.
Monitoreo de amenazas: Utilizar herramientas de detección de amenazas y monitorear de forma constante los sistemas en busca de actividades inusuales.
Plan de respuesta a incidentes: Tener un plan en caso de un ciberataque que incluya procedimientos para contener, investigar y remediar el incidente de manera efectiva.